El Majorana 1, el chip recién lanzado por Microsoft, marca un avance significativo en la computación cuántica. Este chip es el primero en incorporar el material topoconductor, que permite a los qubits existir en un estado que no se limita a ser solo 0 o 1, sino que puede ser ambos a la vez, gracias a la naturaleza de la mecánica cuántica. Este progreso pone a la computación cuántica más cerca de ser una herramienta de uso práctico, en lugar de una tecnología en desarrollo de largo plazo.
Los investigadores consideran que este avance puede resolver problemas que las computadoras tradicionales no pueden abordar, como la simulación de materiales o la mejora de tratamientos médicos.